Venecia es un sitio alucinante. Empezando por su geografía que la distingue de otros destinos en el que los vehículos con ruedas no tienen cabida siempre la ha acompañado un halo de aventura y miles de historias por narrar. Ante su esplendor son muchas batallas políticas y sociales las que han acontecido en los alrededores de la Plaza San Marcos, principal punto de encuentro de los venecianos en el que a partir del siglo XI se oficializó la festividad del Carnaval como un momento para escapar de las rígidas etiquetas impuestas por la sociedad, darse un descanso y mezclar clases sociales bajo un rostro oculto por una máscara.
Quien lea esto pensará que provocaría un caos de inmediato, pero fue tanto el esplendor que derrochó la celebración que los venecianos que es un lugar que supo conservar su mejor carácter civil. Si bien episodios y anécdotas albergan la historia es hasta la fecha que se ha mantenido casi intacto de sus costumbres iniciales, una estética barroca, lujosa y sobrecargada, característica del siglo XVII con máscaras que mantienen sus colores blanco, doradas y plateadas.
El Carnaval de Venecia es distinto a los del resto del mundo. Si bien coincide en darse justo en el momento anterior a la cuaresma este dura casi 10 días. Mucha gente de naciones vecinas y de sitios remotos incluye en su lista de cosas por hacer acudir por estas fechas solo a disfrutar del esplendor que esta celebración representa.
El récord de visitante se alcanza el día martes. Es impresionante ver cómo se llenan las solicitudes en agencias por estas fechas siendo este destino algo oneroso por su particular geografía y por todo lo exuberante que la misma representa. Y es que una fiesta, en su mayoría privadas, puede costar solo la entrada unos 500 € a los que se les suma la inversión en los trajes que son de seda e incluyen ornamentos con encajes delicados.
Durante las fechas los paseos en góndolas con pasajeros disfrazados es toda una sensación. Entretanto, el Gran Canal de Venecia es un escenario muy importante en el que muchos degustan fritella, dulce típico de la región (bastante similares a los buñuelos) y en especial, de la celebración mientras capturan a quienes visten sus mejores galas para tomarse una foto con los turistas.
Adicional al Carnaval, es notable destacar que el carácter religioso siempre buscó desplazar esta fiesta pagana. La historia registra que El emperador del Sacro Imperio Romano Germánico lo prohibió, así como el emperador de Austria, Francisco II en algunos momentos del siglo XVIII durante su máximo esplendor. Incluso Bonaparte hizo lo propio, pero por motivos políticos, buscando evitar conspiraciones. Sin embargo, nada de esto logró opacar el evento más importante de Venecia a lo largo del año. No obstante, en paralelo, alcanzó a posicionarse lo que se conoce como Fiesta de las Marías que conmemora un hecho de la historia en 1273, cuando unos piratas ilirios raptaron a varias mujeres casadas con ropajes y joyas, pero la población consiguió salvarlas y liberarlas. Así, en nombre de ese triunfo, las venecianas más bellas desfilan por las calles con trajes tradicionales y durante el primer domingo de Carnaval se celebra el vuelo del Ángel o vuelo de la Colombina, en el que se lanza, desde el campanario hacia el Palacio Ducal de Venecia, una paloma de metal atravesada con una cuerda que, actualmente, ha sido reemplazada por una persona que interpreta al ángel. El personaje es llevado por un acróbata que desciende desde los 80 metros de alto de la torre lanzando papel picado, confeti o pequeños regalos a los espectadores fascinados.
Curiosidades del Carnaval
• El escrito más antiguo que refiere a la celebración del Carnaval, data del año 1094. Sin embargo, fue institucionalizado en 1296 por el Senado de la República y a partir de 1979, adquirió su carácter de fiesta oficial ya que en ese transcurrir muchos altibajos no habían sido formalizado o habían dejado de serlo.
• Siempre un objetivo político. Aprovechando el desenfreno, muchos gobernantes se mezclaban con sus súbditos para indagar la opinión que tenían de ellos y pulsar los problemas de la ciudad.
• Tal esplendor no podría ser posible sin una estructura y es que los fabricantes de máscaras, los pintores a quienes se les llama mascherei trabajan en equipo bajo unos estatutos a fin de dar uniformidad a sus piezas. De otra manera, la tradición no sería la misma.
• Si bien diez días es lo que incluye la fiesta de manera oficial, el carnaval ha extendido su duración hasta por seis meses. Esto sucedió en el siglo XVIII. Sí, es una locura, pero es lo que ha asentado las bases para tomar tan en serio estas festividades ¿Imaginas un carnaval de octubre a marzo?
• Durante la peste, los galenos solicitaron una máscara picuda para evitar contagiarse. Evidentemente esto daba pistas si bien no sobre su identidad, si, sobre su oficio. Y es que claro, en qué lugar no es necesario la presencia de un profesional de la salud.
• A propósito de la Fiesta de las Marías. Son un total de 12 que representan los meses del año y a los apóstoles las que se disputan el título anualmente para hacer el desfile de rigor
• Fiestas públicas y privadas. Aunque las calles y canales venecianos están a rebosar durante los diez días de carnaval y las fiestas o desfiles surgen en cada esquina, existe otra cara mucho más exclusiva de la celebración. Los palacetes y salones de baile de las islas celebran, durante esos días, grandes fiestas repletas de lujo y en las que es muy difícil entrar. Suele ser necesaria una invitación directa y se requieren disfraces de alta calidad y precio aún más alto.
• Disfraces a precio de oro. Aunque existen opciones muy económicas para disfrazarse e introducirse en el ambiente del carnaval veneciano, el rango de precios sube hasta alcanzar cifras desorbitadas. Muchos trajes y máscaras están hechos a mano con materiales de calidad y son auténticas obras de arte, por lo que su simple alquiler para unos días puede alcanzar fácilmente las tres o cuatro cifras.
Instagram: @bwturismo
Twitter: @bwturismo
Fanpage: Bw Turismo
YouTube: BwTurismo
Quien lea esto pensará que provocaría un caos de inmediato, pero fue tanto el esplendor que derrochó la celebración que los venecianos que es un lugar que supo conservar su mejor carácter civil. Si bien episodios y anécdotas albergan la historia es hasta la fecha que se ha mantenido casi intacto de sus costumbres iniciales, una estética barroca, lujosa y sobrecargada, característica del siglo XVII con máscaras que mantienen sus colores blanco, doradas y plateadas.
El Carnaval de Venecia es distinto a los del resto del mundo. Si bien coincide en darse justo en el momento anterior a la cuaresma este dura casi 10 días. Mucha gente de naciones vecinas y de sitios remotos incluye en su lista de cosas por hacer acudir por estas fechas solo a disfrutar del esplendor que esta celebración representa.
El récord de visitante se alcanza el día martes. Es impresionante ver cómo se llenan las solicitudes en agencias por estas fechas siendo este destino algo oneroso por su particular geografía y por todo lo exuberante que la misma representa. Y es que una fiesta, en su mayoría privadas, puede costar solo la entrada unos 500 € a los que se les suma la inversión en los trajes que son de seda e incluyen ornamentos con encajes delicados.
Durante las fechas los paseos en góndolas con pasajeros disfrazados es toda una sensación. Entretanto, el Gran Canal de Venecia es un escenario muy importante en el que muchos degustan fritella, dulce típico de la región (bastante similares a los buñuelos) y en especial, de la celebración mientras capturan a quienes visten sus mejores galas para tomarse una foto con los turistas.
Adicional al Carnaval, es notable destacar que el carácter religioso siempre buscó desplazar esta fiesta pagana. La historia registra que El emperador del Sacro Imperio Romano Germánico lo prohibió, así como el emperador de Austria, Francisco II en algunos momentos del siglo XVIII durante su máximo esplendor. Incluso Bonaparte hizo lo propio, pero por motivos políticos, buscando evitar conspiraciones. Sin embargo, nada de esto logró opacar el evento más importante de Venecia a lo largo del año. No obstante, en paralelo, alcanzó a posicionarse lo que se conoce como Fiesta de las Marías que conmemora un hecho de la historia en 1273, cuando unos piratas ilirios raptaron a varias mujeres casadas con ropajes y joyas, pero la población consiguió salvarlas y liberarlas. Así, en nombre de ese triunfo, las venecianas más bellas desfilan por las calles con trajes tradicionales y durante el primer domingo de Carnaval se celebra el vuelo del Ángel o vuelo de la Colombina, en el que se lanza, desde el campanario hacia el Palacio Ducal de Venecia, una paloma de metal atravesada con una cuerda que, actualmente, ha sido reemplazada por una persona que interpreta al ángel. El personaje es llevado por un acróbata que desciende desde los 80 metros de alto de la torre lanzando papel picado, confeti o pequeños regalos a los espectadores fascinados.
Curiosidades del Carnaval
• El escrito más antiguo que refiere a la celebración del Carnaval, data del año 1094. Sin embargo, fue institucionalizado en 1296 por el Senado de la República y a partir de 1979, adquirió su carácter de fiesta oficial ya que en ese transcurrir muchos altibajos no habían sido formalizado o habían dejado de serlo.
• Siempre un objetivo político. Aprovechando el desenfreno, muchos gobernantes se mezclaban con sus súbditos para indagar la opinión que tenían de ellos y pulsar los problemas de la ciudad.
• Tal esplendor no podría ser posible sin una estructura y es que los fabricantes de máscaras, los pintores a quienes se les llama mascherei trabajan en equipo bajo unos estatutos a fin de dar uniformidad a sus piezas. De otra manera, la tradición no sería la misma.
• Si bien diez días es lo que incluye la fiesta de manera oficial, el carnaval ha extendido su duración hasta por seis meses. Esto sucedió en el siglo XVIII. Sí, es una locura, pero es lo que ha asentado las bases para tomar tan en serio estas festividades ¿Imaginas un carnaval de octubre a marzo?
• Durante la peste, los galenos solicitaron una máscara picuda para evitar contagiarse. Evidentemente esto daba pistas si bien no sobre su identidad, si, sobre su oficio. Y es que claro, en qué lugar no es necesario la presencia de un profesional de la salud.
• A propósito de la Fiesta de las Marías. Son un total de 12 que representan los meses del año y a los apóstoles las que se disputan el título anualmente para hacer el desfile de rigor
• Fiestas públicas y privadas. Aunque las calles y canales venecianos están a rebosar durante los diez días de carnaval y las fiestas o desfiles surgen en cada esquina, existe otra cara mucho más exclusiva de la celebración. Los palacetes y salones de baile de las islas celebran, durante esos días, grandes fiestas repletas de lujo y en las que es muy difícil entrar. Suele ser necesaria una invitación directa y se requieren disfraces de alta calidad y precio aún más alto.
• Disfraces a precio de oro. Aunque existen opciones muy económicas para disfrazarse e introducirse en el ambiente del carnaval veneciano, el rango de precios sube hasta alcanzar cifras desorbitadas. Muchos trajes y máscaras están hechos a mano con materiales de calidad y son auténticas obras de arte, por lo que su simple alquiler para unos días puede alcanzar fácilmente las tres o cuatro cifras.
Instagram: @bwturismo
Twitter: @bwturismo
Fanpage: Bw Turismo
YouTube: BwTurismo
Siguenos en
Telegram,
Instagram,
Facebook y
Twitter
para recibir en directo todas nuestras actualizaciones