Caracas.- La hoja de ruta de una empresa está dada por el norte estratégico y el sentido de dirección, mientras el GPS está representado por el presupuesto. Si el mapa no está actualizado, el GPS no será de gran ayuda. La planificación estratégica es una herramienta de calibre muy alto para la volatilidad de nuestra situación, que a veces enfatiza la protección frente a las amenazas, y casi siempre la identificación y aprovechamiento de las oportunidades. Hemos desarrollado el concepto de “Refrescamiento de la Estrategia” para poder darle mayor flexibilidad tratando de preservar de daño a los componentes estructurales del modelo de negocio. Por ejemplo, el análisis de escenarios debe hacerse a un nivel tal que no le induzca rigideces, mientras que el análisis situacional debe ponerse en una perspectiva que evite marchas y contramarchas. Está basado en el concepto de Gerencia Estratégica (Strategic management) que es el que con mayor flexibilidad permite “hacer bailar al elefante”, sin que se lesione o pierda el equilibrio y se caiga; para administrar conjuntamente los ambientes interno y externo, con mayor énfasis en el entorno sociopolítico que a veces es como una neblina que dificulta saber a qué nos estamos enfrentando. Para la toma de decisiones, será importante saber en qué negocio NO estamos. Proponemos refrescar la estrategia y desarrollar una cartera de acciones/proyectos estratégicos para operacionalizarla, de forma que la gerencia se sienta más cómoda tanto con el mapa, como con el GPS.

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