Caracas.- Todo se definirá en Valencia, España. Después de más de 2.151 kilómetros recorridos y 19 carreras disputadas, el domingo 6 de noviembre, se disputará la última y decisiva válida del Mundial de MotoGP.
Entonces el italiano Francesco “Pecco” Bagnaia (Ducati) y el francés Fabio Quartararo (Yamaha) lo apostarán todo por el título de la magna clase del motociclismo de velocidad.
Bagnaia, con cinco victorias en los últimos nueve Grandes Premios, es el principal favorito de ascender a lo más alto del podio en la categoría reina, ya que solo le bastaría con finalizar en el puesto 13° en Valencia para coronar.
Por lo pronto, el piloto milanés es el líder de las clasificaciones con un acumulado de 258 puntos, 23 unidades más que el especialista de Niza, quien se vino abajo en la última parte de la temporada.
En efecto, Quartararo dominaba cómodamente la tabla con 172 puntos en las primeras diez carreras del calendario, pero después del Gran Premio de Alemania, que ganó en Sachsenring el 19 de junio, se desplomó en barrena indetenible para ver, prácticamente resignado, como se le escapaba entre los dedos el título de la MotoGP.
Por su parte, Pecco Bagnaia ha impuesto en las últimas válidas una hegemonía casi dictatorial entre triunfos, poles positions y vueltas rápidas en carrera, que le abrogan un favoritismo casi absoluto a falta de una prueba.
Solo una debacle
Tras lo acontecido en la carrera de Sepang del domingo 23, en la cual Bagnaia se impuso sobre su compatriota y compañero de Ducati, Enea Bastianini, sólo una debacle en Valencia, podría apartar del título al actual líder, pero en este sentido hay antecedentes.
Tras lo acontecido en la carrera de Sepang del domingo 23, en la cual Bagnaia se impuso sobre su compatriota y compañero de Ducati, Enea Bastianini, sólo una debacle en Valencia, podría apartar del título al actual líder, pero en este sentido hay antecedentes.
Y el que retumba como un tambor en las sienes de Pecco es el que sufrió su ídolo, amigo y mentor, Valentino Rossi (Yamaha), quien el 29 de octubre de 2006, en el mismo Circuit Ricardo Tormo, se preparaba para celebrar la consecución de su sexto título consecutivo, pero una inesperada caída -ante 130.000 aficionados- lo alejó del cetro, que fue a parar a manos del estadounidense Nicky Hayden (Honda).
"Fue una carrera difícil, cometí un error en la salida y luego otro cuando me caí. No entendí por qué me fui al suelo, pero cuando te caes siempre es un error tuyo", dijo Rossi entonces.
Y ahora, 16 años después, ese error se magnifica en el cerebro de Bagnaia, quien trata de estar relajado y sin presiones para la competencia final. “No pienso ver ni recordar aquella carrera. Estoy bien en este momento. Aún no creo que acaricie el título con la yema de los dedos, pero estoy bastante tranquilo, sin pensar en eso. Sé que será muy importante el resultado que hagamos”, comentó Pecco, quien reconoció que su buena salida en la pista de Sepang fue determinante para que ganara el GP de Malasia el pasado domingo 23.
“La sólida arrancada en Sepang me ayudó mucho para ganar, pero lo bueno fueron las primeras vueltas, en las cuales empujé para abrirme un hueco detrás de Martín (Jorge), hasta que se cayó. Después lo que hice fue gestionar la carrera. Cuando vi que Fabio (Quartararo) había avanzado al tercero, me dije a mí mismo que tenía que ponerme primero y tirar fuerte, para que no llegase a nosotros. Al final, Enea (Bastianini) tenía un ritmo bastante fuerte y no fue fácil, pero ganamos”, dijo Pecco tras el GP de Malasia.
“Ahora, en los días previos antes de Valencia, voy a intentar estar tranquilo en casa y a relajarme un poco”, agregó el piloto italiano de Ducati. Por supuesto que ese relax no incluye ver la carrera de Valencia del año 2006, donde Valentino Rossi perdió el título cuando prácticamente lo tenía en el bolsillo.
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