Margarita recibe solo el 10% de los turistas desde hace seis años
La mayor preocupación del sector es la posibilidad en la retroactividad de las prestaciones, según destacó el presidente de la Cámara de Comercio de la entidad, Eduard Noguera
Porlamar.- La actual temporada vacacional es la más crítica de los últimos años a consecuencia de la pérdida del poder adquisitivo de los venezolanos y su cambio de prioridad, según calificó este jueves el presidente de la Cámara de Comercio Puerto Libre y Producción de Nueva Esparta, Eduard Noguera.
“Una comparación breve entre agosto del año 2012 cuando llegamos a recibir hasta 3 millones de visitantes, con el mismo mes de este año, cuando la cifra no supera los 350 mil turistas, representa que estamos recibiendo apenas el 10% de los turistas que llegamos a tener, lo cual es sumamente preocupante para una región cuya principal fuerza es el turismo”, enfatizó el superintendente, e hizo hincapié sobre lo grave que representa que toda la infraestructura en la que se invirtió anteriormente, en estos momentos esté subutilizada.
El sector turístico y comercial insiste en que la gran debilidad de la región es la pérdida de conectividad tanto marítima como aérea, aunque se reconocen esfuerzos por mejorar la movilidad de pasajeros los resultados parecen infructuosos.
La venta de boletos en dólares para rutas nacionales ha afectado también la posibilidad de vacacionar en la Isla, al estimarse que el 90% de los venezolanos tiene como prioridad garantizar la alimentación, y debe proteger el reinicio del año escolar de sus hijos.
El dirigente empresarial afirma que la situación económica nacional ha tenido un impacto muy fuerte en las importaciones, la reposición de inventarios y el presupuesto laboral, todo lo cual ha incidido directa y negativamente en las ofertas al público.
Incertidumbre laboral
Noguera destaca que la mayor angustia para los comerciantes la representa la indefinición del pago de prestaciones.
“Hasta que no haya claridad en los planteamientos salariales estaremos en una inestabilidad muy peligrosa tanto empleados como empleadores, pues no es lo mismo pagar a una persona que decide renunciar en base al salario actual impuesto por el Gobierno, es muy fuerte sostener este nivel de pago”.
En todo caso, esperan que el Gobierno siga evaluando las consecuencias de las medidas y se tomen las decisiones que menos desequilibrio causen al sector comercial, productivo y a los trabajadores.
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