Al menos diez familias resultaron afectadas por el incendio ocurrido aproximadamente a las 3:00 de la madrugada de este viernes en el puente Anauco ubicado entre San Bernardino y la avenida Panteón en el centro de Caracas el cual arrasó con un taller y cinco viviendas.
El siniestro fue ocasionado por una falla en la línea de 69 kilovatios proveniente de la subestación Los Anaucos que atraviesa el puente, “es un tipo de cable especial que va relleno con aceite para refrigerarlo, la falla provocó una fuga de aceite, el cable hizo cortocircuito y se incendió, el fuego se extendió a un taller adyacente y a los ranchos ubicados debajo del puente”, indicó un vocero de Corpoelec.
Funcionarios de Protección Civil señalaron que en total resultaron damnificadas 35 personas, entre adultos y niños, quienes serán reubicados en albergues cercanos.
Las mascotas de las personas que vivían debajo del puente también resultaron traumatizadas por el siniestro, los perros permanecían con sus orejas gachas, acostados en el suelo, "pobrecitos, ahora nadie se va a hacer cargo de ellos, sus dueños perdieron la casa, ahora ellos no tienen donde vivir y dormir", dijo una señora que estaba cerca de las mascotas.
“Se trata de varias familias que no tenían vivienda y que terminaron debajo del puente.
Todo estaba en llamas
“Yo estaba durmiendo cuando escuché un sonido extraño, como un siseo, me desperté y vi fuego, me levanté como pude y comencé a llamar a todos, a mi tío a unos primos que viven acá, ayudé a sacar a los niños y comenzamos a subir, pero producto del humo me desmayé”, señaló Yoan Lugo.
“El fuego se extendió con mucha rapidez, no hubo tiempo de rescatar nada, salimos con la bebé de 16 días, mi sobrinito y mi tío, todo estaba en llamas”.
Agregó que perdieron todos sus bienes “quedamos en la calle, sin ropa, comida, sin nada, menos mal que no perdí las muletas y la prótesis” dijo el joven discapacitado.
Mi trabajo hecho cenizas
"Teníamos dos años acá, ya nos habíamos establecido, ahora lo perdimos todo, gracias a dios no resultó nadie herido, ni muerto, nosotros teníamos a dos trabajadores acá, les cedimos los espacios para que durmieran acá porque no tenían casa, ellos se dieron cuenta del incendio a tiempo, les avisaron y pudieron salir, pero no les dio tiempo de sacar nada, ni una moto que tenían allí abajo, nada, se quemó muy rápido, si logramos salvar el 10% de las herramientas y materiales sería mucho".
“Lo perdimos todo, reparábamos amortiguadores. El fuego acabó con herramientas, materiales y amortiguadores. Las pérdidas son enormes, mi trabajo quedó vuelto cenizas, ¿cómo volver a comenzar?" Se preguntó Génesis Castillo, dueña del taller de reparación y reconstrucción de amortiguadores que fue consumido por las llamas.
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