El diputado Arnoldo Benítez, presidente de la subcomisión especial para Atención de Jubilados y Pensionados de la Asamblea Nacional, considera que en la actualidad los adultos mayores se encuentran condenados a muerte ante la indolencia del Ejecutivo Nacional, que los mantiene con ingresos de hambre a través de las pensiones.
Aseguró que en estos momentos los adultos mayores están muriendo de hambre y por complicaciones de la salud. “Muchos se han desmayado en las colas de los bancos esperando su turno para cobrar la pensión, porque no pueden enfrentar los altos costos de la comida y mucho menos el precio de los medicamentos”, aseguró.
“En la actualidad los adultos mayores devengan 40 mil bolívares soberanos a través de la pensión y de acuerdo con las cifras del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cendas) la canasta alimentaria se sitúa en 2.498.746 bolívares, lo que significa que para alimentarse un venezolano requiere de 62,46 salarios mínimos por día. El precio de los medicamentos sobrepasan el monto de la canasta alimentaria”, expresó el legislador.
Gobierno en desacato
El presidente de la subcomisión de Pensionados y Jubilados recordó que en febrero del año 2016 se presentó el proyecto de ley del bono de alimentación y medicamentos para los adultos mayores, que fue aprobado por unanimidad en la AN y en abril del 2016 el TSJ determinó que la referida ley es constitucional y otorgó al Ejecutivo un plazo de 10 días para ejecutar la ley. Sin embargo hasta los momentos no se le ha dado respuesta a los adultos mayores.
Recordó Benítez que en diciembre del año pasado el Parlamento aprobó un proyecto de Ley Especial No Contributiva que, bajo el artículo 86 de la Constitución, ampara a quien no tuvo la capacidad contributiva de ser excluido de la seguridad social. “Venezuela cuenta con la vitalidad de sus jóvenes y la experiencia de sus viejos para la reconstrucción del país”, dijo.
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