Caracas.- El Gobierno español arranca el año en el que se ha puesto como objetivo conmemorar la muerte del dictador Francisco Franco. "Es un acto importante para nuestro país", ha expuesto Pedro Sánchez.
El presidente del Gobierno ha dado el pistoletazo de salida azuzando el miedo al regreso de una dictadura en España para defender la necesidad de esta conmemoración. "Puede volver a ocurrir. No hace falta ser de una determinada ideología para mirar con enorme tristeza y con terror los años oscuros del franquismo y temer que ese retroceso se repita. Basta con ser demócratas".
La Moncloa ha hecho de esta conmemoración una palanca para tratar de recuperar la agenda y la iniciativa política, al tiempo que abrir una puerta con la que confrontar con la derecha. La línea de defensa frente a quienes critican esta decisión de hacer de 2025 el año de celebración de la muerte de Franco pivota sobre todo en dos ejes: la necesidad de educar a los jóvenes para que no olviden y apartarlos de posibles cantos de sirena -los jóvenes, un nicho de voto importante- y alertar de que la democracia está en juego y el fantasma de la dictadura sobrevuela nuestras cabezas.
"Los valores y los regímenes autocráticos están avanzando. El fascismo que creímos dejar atrás es la tercera fuerza en Europa. La internacional reaccionaria, como dice Macron, o la internacional ultraderechista que denunciamos desde España, liderada por el hombre más rico del planeta, ataca nuestras instituciones, azuza el odio y llama a apoyar a los herederos del nazismo en Alemania en las próximas elecciones", es una de las reflexiones que ha trasladado Sánchez. Es la primera vez que el presidente del Gobierno se refiere a Elon Musk, uno de los nuevos hombres fuerte de la nueva administración de Donald Trump.
El recorte en los avances y derechos sociales conquistados en democracia, en las últimas décadas, es un argumento recurrente que emplea el Gobierno de Sánchez para tratar de mitigar y contrarrestar la acción política de la oposición. Sánchez, en este primer actos de los entorno a cien que se celebrarán en 2025 para conmemorar la muerte de Franco, no ha nombrado explícitamente al PP y a Vox, pero sí ha habido alusiones indirectas.
El mensaje velado fue el siguiente: "Quienes cantan las virtudes del autoritarismo quieren que olvidemos estas cosas", ha expuesto Sánchez tras hacer una descripción de todo lo que no se podía hacer en los años 70 y que ahora o bien es posible o se han conquistado derechos. "Quieren que olvidemos que España estaba gobernada por una minoría autocrática y represora (...) quieren que olvidemos que aquella España que algunos decían 'una, grande y libre' estaba en realidad hecha pedazos, aislada del mundo y hambrienta, entre otras cosas de libertad".
En La Moncloa está instalado el temor de que el discurso que en ocasiones lanzan desde Vox de bonanza sobre el franquismo sea un elemento de atracción y seducción para los más jóvenes. Un discurso que potencia y con el que coquetean los más jóvenes en las redes sociales. Por ejemplo, uno de los momentos que tiene presente el Gobierno para defender la necesidad de instruir a los jóvenes en lo que supuso la dictadura fue cuando a finales de noviembre un diputado de Vox defendió en el Congreso que el franquismo fue "una etapa de progreso para lograr la unidad nacional". "A los jóvenes de hoy les cuesta entender la escala del cambio que se ha producido en estos 50 años. Incluso a la gente de mi generación le cuesta a veces", ha trasladado Sánchez ante un aforo donde había representantes de la política y la sociedad civil.
Tanto Carmina Gustrán, encargada de coordinar los actos del programa España en libertad, como Sánchez han incidido en la importancia de educar y trasladar a los jóvenes qué supuso la dictadura y qué supone la democracia. "Trasmitir a los jóvenes el valor de la democracia en un momento en que ésta da signos de retroceso en buena parte del mundo", ha expuesto Gustrán. "Transmitir a nuestros jóvenes la importancia de vivir en democracia, porque cuando uno ha pasado toda su vida bajo su velo protector es fácil olvidar las fortalezas de la democracia y dejarse seducir por quienes prometen orden y seguridad a cambio de arrebatarles el poder de elegir el destino de uno mismo", ha completado Sánchez.
En un acto donde la única reminiscencia al blanco y negro ha sido la portada de "Franco ha muerto" -no ha habido imágenes de la dictadura en los vídeos-, se ha anunciado que habrá actos de la más diversa naturaleza, como conferencias y debates protagonizados por expertos universitarios, se impulsarán películas y documentales, exposiciones, juegos, apps, cursos, talleres y hasta un escape room temático.
El presidente del Gobierno ha dado el pistoletazo de salida azuzando el miedo al regreso de una dictadura en España para defender la necesidad de esta conmemoración. "Puede volver a ocurrir. No hace falta ser de una determinada ideología para mirar con enorme tristeza y con terror los años oscuros del franquismo y temer que ese retroceso se repita. Basta con ser demócratas".
La Moncloa ha hecho de esta conmemoración una palanca para tratar de recuperar la agenda y la iniciativa política, al tiempo que abrir una puerta con la que confrontar con la derecha. La línea de defensa frente a quienes critican esta decisión de hacer de 2025 el año de celebración de la muerte de Franco pivota sobre todo en dos ejes: la necesidad de educar a los jóvenes para que no olviden y apartarlos de posibles cantos de sirena -los jóvenes, un nicho de voto importante- y alertar de que la democracia está en juego y el fantasma de la dictadura sobrevuela nuestras cabezas.
"Los valores y los regímenes autocráticos están avanzando. El fascismo que creímos dejar atrás es la tercera fuerza en Europa. La internacional reaccionaria, como dice Macron, o la internacional ultraderechista que denunciamos desde España, liderada por el hombre más rico del planeta, ataca nuestras instituciones, azuza el odio y llama a apoyar a los herederos del nazismo en Alemania en las próximas elecciones", es una de las reflexiones que ha trasladado Sánchez. Es la primera vez que el presidente del Gobierno se refiere a Elon Musk, uno de los nuevos hombres fuerte de la nueva administración de Donald Trump.
El recorte en los avances y derechos sociales conquistados en democracia, en las últimas décadas, es un argumento recurrente que emplea el Gobierno de Sánchez para tratar de mitigar y contrarrestar la acción política de la oposición. Sánchez, en este primer actos de los entorno a cien que se celebrarán en 2025 para conmemorar la muerte de Franco, no ha nombrado explícitamente al PP y a Vox, pero sí ha habido alusiones indirectas.
El mensaje velado fue el siguiente: "Quienes cantan las virtudes del autoritarismo quieren que olvidemos estas cosas", ha expuesto Sánchez tras hacer una descripción de todo lo que no se podía hacer en los años 70 y que ahora o bien es posible o se han conquistado derechos. "Quieren que olvidemos que España estaba gobernada por una minoría autocrática y represora (...) quieren que olvidemos que aquella España que algunos decían 'una, grande y libre' estaba en realidad hecha pedazos, aislada del mundo y hambrienta, entre otras cosas de libertad".
En La Moncloa está instalado el temor de que el discurso que en ocasiones lanzan desde Vox de bonanza sobre el franquismo sea un elemento de atracción y seducción para los más jóvenes. Un discurso que potencia y con el que coquetean los más jóvenes en las redes sociales. Por ejemplo, uno de los momentos que tiene presente el Gobierno para defender la necesidad de instruir a los jóvenes en lo que supuso la dictadura fue cuando a finales de noviembre un diputado de Vox defendió en el Congreso que el franquismo fue "una etapa de progreso para lograr la unidad nacional". "A los jóvenes de hoy les cuesta entender la escala del cambio que se ha producido en estos 50 años. Incluso a la gente de mi generación le cuesta a veces", ha trasladado Sánchez ante un aforo donde había representantes de la política y la sociedad civil.
Tanto Carmina Gustrán, encargada de coordinar los actos del programa España en libertad, como Sánchez han incidido en la importancia de educar y trasladar a los jóvenes qué supuso la dictadura y qué supone la democracia. "Trasmitir a los jóvenes el valor de la democracia en un momento en que ésta da signos de retroceso en buena parte del mundo", ha expuesto Gustrán. "Transmitir a nuestros jóvenes la importancia de vivir en democracia, porque cuando uno ha pasado toda su vida bajo su velo protector es fácil olvidar las fortalezas de la democracia y dejarse seducir por quienes prometen orden y seguridad a cambio de arrebatarles el poder de elegir el destino de uno mismo", ha completado Sánchez.
En un acto donde la única reminiscencia al blanco y negro ha sido la portada de "Franco ha muerto" -no ha habido imágenes de la dictadura en los vídeos-, se ha anunciado que habrá actos de la más diversa naturaleza, como conferencias y debates protagonizados por expertos universitarios, se impulsarán películas y documentales, exposiciones, juegos, apps, cursos, talleres y hasta un escape room temático.
Con información de El Mundo
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