Gabriela Gutiérrez Peroza
Mérida siempre es una carta sobre la mesa para el disfrute en familia y en pareja. La entidad abre sus montañas al amor y al compartir con los seres más queridos. Su belleza natural, que atrapa las miradas de los visitantes, la convierten en un recinto para enamorarse.
La entidad ofrece, en medio de su característico clima frío, un calor humano inigualable gracias a las atenciones afables de sus locales.
Diversión familiar
Los parques temáticos, con un despliegue autóctono increíble, que nacieron hace muchos años de la mano de Alexis Montilla, un fiel ejemplo de constancia y trabajo, se han convertido en una atracción familiar reconocida a nivel nacional.
Con tres opciones diferentes: La Montaña de los Sueños, La Venezuela de Antier y Los Aleros, distribuidas en diversos municipios pero bajo un mensaje unificado, Montilla nos abre las puertas de sus espacios turísticos bajo un sello familiar.
Su principal propósito es promocionar la historia, la cultura, las tradiciones y las raíces regionales y nacionales de una forma muy amena y divertida.
Y si hablamos del tema romántico, en La Venezuela de Antier los visitantes disfrutan de una parodia muy jocosa de una boda folclórica, durante la cual sus personajes hacen bromas y contagian con el buen humor a los visitantes.
Los enamorados disfrutan el resurgimiento merideño
Llegar hasta la cima de los Andes merideños se puede convertir en un paseo romántico. La actividad del Teleférico Mukumbarí, que finalmente abrió sus puertas en su totalidad, es una experiencia invaluable. La última estación sigue siendo una de las más visitadas y esperadas para disfrutar. Conocer el Pico Espejo y llegar a uno de los puntos más altos de Venezuela, con más de 4.765 m.s.n.m., es una aventura única.
También es ideal conocer los puntos naturales que están en las estaciones, por ejemplo, en la cuarta parada, "Loma Redonda", los visitantes podrán deleitarse con bellezas naturales como la laguna "Anteojos", ubicada cerca de la estación. Un lugar increíble para nutrir el amor mientras se disfruta la hermosa Sierra Nevada
Aguas termales de La Musui
Un plan sumamente romántico en medio del frío de Mérida es encontrar el calorcito en las aguas termales de La Musui. Este jacuzzi natural se encuentra ubicado a 45 minutos de la ciudad de Mérida, cerca del pequeño caserío de La Musui.
Estas maravillosas aguas termales están ocultas en medio de las frías montañas andinas y ofrecen un refugio de tranquilidad y unas vistas increíbles del glaciar del Pico Humboldt, el último que se puede encontrar en el país.
En este sector hay cómodas posadas que cuentan con hermosas vistas y que se convierten en el albergue más romántico para celebrar el Día de los Enamorados.
Laguna Mucubají
Hacer una excursión hasta la Laguna Mucubaji es otra opción romántica para este Día de San Valentín. El hermoso escenario de la laguna de aguas oscuras donde se ven reflejadas las montañas, rodeadas de frailejones y la neblina descendiendo, es un espectáculo maravilloso, lleno de misterio, donde se respira tranquilidad.
Los visitantes suelen quedarse extasiados durante horas viendo el paisaje andino.
Capilla de Piedra
Muchos son los enamorados que han decidido plasmar sus recuerdos de boda, luciendo su esmoquin y vestido de novia frente a la Capilla de Piedra construida por el artista Juan Félix Sánchez, en la población de San Rafael del Páramo, en Mucuchíes.
Además de ser un emblemático punto turístico, su construcción fue una demostración del inmenso amor del artista hacia su tierra natal. Sánchez construyó con sus propias manos, colocando piedras y conchas, el pequeño y pintoresco templo.
Hay muchas otras opciones naturales para aprovecharlas al máximo en compañía del ser amado, de los amigos o familiares: El Pico Humboldt, la travesía de la Culata, Pico Pan de Azúcar, la cascada de la base del Pico Humboldt, la Laguna El Guamache y el Pico el Águila.
En la ciudad de Mérida
Bajo una propuesta innovadora y apostándole a la reinvención con materiales alternativos y sustentables llega "Contenedores Mérida", con una amplia carta en materia culinaria y de coctelería; además, ofrece entretenimiento en las noches merideñas que van acompañadas de una rica y diversa gastronomía.
Si queremos darle un toque dulce a este día especial hay una nueva opción en postres. En una linda casona ambientada con cálidos detalles entre tonos pasteles, está la reconocida chef Gaby Mendoza, quien los deleitará no solo con toques dulces sino también con platos que reflejan magia y sabores auténticos.
En materia de hospedaje destaca el hotel Belensate. Gracias a su infraestructura colonial rodeada de naturaleza, brinda confort a sus huéspedes en habitaciones espaciosas y muy bien decoradas.
Su chef principal, Nelson Castro, deleita a los comensales con un amplio menú de sabores fusionados. Es de resaltar que Castro fue Tenedor de Oro en 2019.
Un lugar que sin duda te enamorará.
¡Vente! que aquí esperan por ti muchos cupidos que estarán para ayudarte a idear el plan perfecto para enamorar.
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