Laura Castellanos: “A los venezolanos les hace falta espacios para estar informados”
La comunicadora, quien se había apartado de los medios para dedicarse al área de consultoría, regresó esta semana a la radio, a través del espacio "60 minutos", que se emite vía Zoom, por 88.1 FM
A lo largo de 26 años de ejercicio profesional, Laura Castellanos (Caracas, 1973) ha trabajado en Radio Caracas Televisión, CNN en Español y Antena 3, entre otros lugares.
La comunicadora social, quien se había apartado de los medios hace cuatro años para dedicarse al área de consultoría, regresó esta semana a la radio, a través del espacio 60 minutos, que se emite vía Zoom, por 88.1 FM.
“Me di cuenta que a los venezolanos les hacía falta más espacios que les permitieran estar informados, pero sobre todo, que les brindaran herramientas para poder interpretar la dura realidad en la que nos toca vivir”, dijo Castellanos a El Universal.
Actualmente, en el exterior, la periodista mantiene proyectos para consolidarse como consultora en estrategia de comunicación, media trainer y conferencista.
- ¿Qué la incentivó a regresar a la radio en septiembre de 2020?
- Muchas cosas. Soy muy intranquila y nunca he dejado de estar pendiente de los medios. Tomé la decisión de retirarme en 2016 para dedicarme a mi faceta como consultora en comunicaciones y media trainer para toda Latinoamérica. Este año ha sido super raro. Me ha enseñado que no hay que dar nada por sentado. Aunque vivo en Venezuela, la mayor parte del año la pasaba viajando a México, Colombia, República Dominicana, Ecuador y otros países. Este año -por la pandemia y el cierre de fronteras- me tocó jugar banca y estando acá me volvió a picar ese gusanillo del periodismo que, en realidad, siempre ha estado allí (…) Así nace 60 minutos con Laura Castellanos, un concepto en donde uno mis conocimientos como periodista con más de 25 años cubriendo y analizando no solo la realidad venezolana, sino también latinoamericana, con mi experiencia como consultora, que me ha permitido entender un poco mejor los procesos sociales, políticos y económicos que están operando en la actualidad mundialmente. Presenté el proyecto a 88.1 FM y les gustó, ¡así que allí estamos!
- ¿Qué novedades le ofrecerá a los oyentes, a través de 60 minutos?
- Me tiene emocionada porque es todo un reto que envuelve muchas cosas. Por un lado, es un espacio que produce mi hija Paula Castellanos... ¿Cuándo yo iba a pensar que esto pasaría? Ella le ha aportado un toque juvenil, enfoque y diseño más actual. El reto de salir desde casa con el Internet venezolano, por plataforma Zoom, nos ha hecho un poco dramático el debut (risas).
- El formato emula un poco los podcast que tan de moda están. Decidimos poner títulos a cada capítulo. Por ejemplo, esta semana tuvimos el estreno de uno llamado No más política donde abordamos el tema del hartazgo de la gente sobre toda esta crisis y los políticos; en Medicina a la venezolana hablamos del tema sanitario, a través de los ojos de un médico venezolano, que también es músico; y en Fakes news y otras blasfemias le contamos a la gente, en 60 minutos, de qué tratan los portales de verificación y cómo hacerles frente. Y tenemos participación del público, a través de las redes sociales y ha sido excelente.
- Además de transmitir por 88.1 FM, ¿de qué otros recursos se vale usted y su equipo de producción para que se multiplique su mensaje?
- Quiero hacer acento local, pero con visión global. Tengo muchos seguidores en otros países y mi idea es trascender y llegar a ellos también. En Venezuela es cuesta arriba por el tema de la señal de Internet, pero estamos adecuando y grabando todo para diluirlo por el tejido de redes. Próximamente, estaremos por YouTube y la idea es hacer de 60 minutos un podcast con mayor libertad y contenidos más variados.
- ¿Cómo valora informativamente un año que nadie vio venir, un año en pandemia?
- Un año en donde el tema pandemia colapsó todo, pero también nos ha permitido descubrir y darnos cuenta de que simplemente nada puede darse por hecho. Estamos en una sociedad nerviosa, angustiada y ahora también frustrada por lo largo de esta cuarentena. La gente necesita información, pero también empatía, humanidad y sentirse escuchados. Las noticias no pueden seguir como vienen, hay que cambiar el formato porque nuestro consumidor y la sociedad así lo requieren. Creo que la gente también está cansada de los formatos actuales: los mismos enfoques, los mismos opinadores. Creo que esto apenas comienza, porque luego de la pandemia viene el "después" y es una aguda crisis económica y social. No quiere decir que venga el armageddon, pero sí una nueva forma de ver las cosas.
- ¿Cuáles considera son los grandes retos a los que se enfrentan los comunicadores sociales en un momento histórico como el que se está viviendo?
- Si le preguntas a un venezolano, te dirá que el de la conectividad, que no le alcanza el sueldo o que se le fue la luz. Los retos, a nivel profesional, creo que siempre serán los mismos: Acceder a la información sin cortapisas y poderla transmitir a nuestros públicos. He ido y venido de los medios varias veces en los últimos años, y cada vez hay menos medios tradicionales disponibles y más digitales. La información es más horizontal y el ciudadano, -el infociudadano- es parte activa de la ecuación comunicativa. Los periodistas y medios también ejercemos ahora una nueva función: la de verificadores de información, la gente acude a nosotros para validar si un contenido es real o engañoso. Eso supone una mayor preparación y, a la vez, mesura de parte de los comunicadores. Estamos más expuestos y somos más vulnerables desde todo punto de vista.
- Además de la radio, ¿en qué otros proyectos profesionales se encuentra concentrada actualmente?
- En el exterior mantengo mis proyectos de consolidarme como consultora en estrategia de comunicación, media trainer y conferencista que vengo adelantando en varios países. Es un terreno netamente de hombres, donde un grupo de mujeres nos abrimos paso por toda América Latina. Soy socia fundadora de la ONG Mujeres de la Política que agrupa a mujeres de muchos países y trabaja por el tema de la igualdad de género. Acá soy actualmente la vicepresidenta de la Asociación Venezolana de Consultores Políticos y no descarto, en un futuro, abrir una academia que brinde contenidos actualizados y modernos a los estudiantes y jóvenes colegas periodistas. @yolimer
La comunicadora social, quien se había apartado de los medios hace cuatro años para dedicarse al área de consultoría, regresó esta semana a la radio, a través del espacio 60 minutos, que se emite vía Zoom, por 88.1 FM.
“Me di cuenta que a los venezolanos les hacía falta más espacios que les permitieran estar informados, pero sobre todo, que les brindaran herramientas para poder interpretar la dura realidad en la que nos toca vivir”, dijo Castellanos a El Universal.
Actualmente, en el exterior, la periodista mantiene proyectos para consolidarse como consultora en estrategia de comunicación, media trainer y conferencista.
- ¿Qué la incentivó a regresar a la radio en septiembre de 2020?
- Muchas cosas. Soy muy intranquila y nunca he dejado de estar pendiente de los medios. Tomé la decisión de retirarme en 2016 para dedicarme a mi faceta como consultora en comunicaciones y media trainer para toda Latinoamérica. Este año ha sido super raro. Me ha enseñado que no hay que dar nada por sentado. Aunque vivo en Venezuela, la mayor parte del año la pasaba viajando a México, Colombia, República Dominicana, Ecuador y otros países. Este año -por la pandemia y el cierre de fronteras- me tocó jugar banca y estando acá me volvió a picar ese gusanillo del periodismo que, en realidad, siempre ha estado allí (…) Así nace 60 minutos con Laura Castellanos, un concepto en donde uno mis conocimientos como periodista con más de 25 años cubriendo y analizando no solo la realidad venezolana, sino también latinoamericana, con mi experiencia como consultora, que me ha permitido entender un poco mejor los procesos sociales, políticos y económicos que están operando en la actualidad mundialmente. Presenté el proyecto a 88.1 FM y les gustó, ¡así que allí estamos!
- ¿Qué novedades le ofrecerá a los oyentes, a través de 60 minutos?
- Me tiene emocionada porque es todo un reto que envuelve muchas cosas. Por un lado, es un espacio que produce mi hija Paula Castellanos... ¿Cuándo yo iba a pensar que esto pasaría? Ella le ha aportado un toque juvenil, enfoque y diseño más actual. El reto de salir desde casa con el Internet venezolano, por plataforma Zoom, nos ha hecho un poco dramático el debut (risas).
- El formato emula un poco los podcast que tan de moda están. Decidimos poner títulos a cada capítulo. Por ejemplo, esta semana tuvimos el estreno de uno llamado No más política donde abordamos el tema del hartazgo de la gente sobre toda esta crisis y los políticos; en Medicina a la venezolana hablamos del tema sanitario, a través de los ojos de un médico venezolano, que también es músico; y en Fakes news y otras blasfemias le contamos a la gente, en 60 minutos, de qué tratan los portales de verificación y cómo hacerles frente. Y tenemos participación del público, a través de las redes sociales y ha sido excelente.
- Además de transmitir por 88.1 FM, ¿de qué otros recursos se vale usted y su equipo de producción para que se multiplique su mensaje?
- Quiero hacer acento local, pero con visión global. Tengo muchos seguidores en otros países y mi idea es trascender y llegar a ellos también. En Venezuela es cuesta arriba por el tema de la señal de Internet, pero estamos adecuando y grabando todo para diluirlo por el tejido de redes. Próximamente, estaremos por YouTube y la idea es hacer de 60 minutos un podcast con mayor libertad y contenidos más variados.
- ¿Cómo valora informativamente un año que nadie vio venir, un año en pandemia?
- Un año en donde el tema pandemia colapsó todo, pero también nos ha permitido descubrir y darnos cuenta de que simplemente nada puede darse por hecho. Estamos en una sociedad nerviosa, angustiada y ahora también frustrada por lo largo de esta cuarentena. La gente necesita información, pero también empatía, humanidad y sentirse escuchados. Las noticias no pueden seguir como vienen, hay que cambiar el formato porque nuestro consumidor y la sociedad así lo requieren. Creo que la gente también está cansada de los formatos actuales: los mismos enfoques, los mismos opinadores. Creo que esto apenas comienza, porque luego de la pandemia viene el "después" y es una aguda crisis económica y social. No quiere decir que venga el armageddon, pero sí una nueva forma de ver las cosas.
- ¿Cuáles considera son los grandes retos a los que se enfrentan los comunicadores sociales en un momento histórico como el que se está viviendo?
- Si le preguntas a un venezolano, te dirá que el de la conectividad, que no le alcanza el sueldo o que se le fue la luz. Los retos, a nivel profesional, creo que siempre serán los mismos: Acceder a la información sin cortapisas y poderla transmitir a nuestros públicos. He ido y venido de los medios varias veces en los últimos años, y cada vez hay menos medios tradicionales disponibles y más digitales. La información es más horizontal y el ciudadano, -el infociudadano- es parte activa de la ecuación comunicativa. Los periodistas y medios también ejercemos ahora una nueva función: la de verificadores de información, la gente acude a nosotros para validar si un contenido es real o engañoso. Eso supone una mayor preparación y, a la vez, mesura de parte de los comunicadores. Estamos más expuestos y somos más vulnerables desde todo punto de vista.
- Además de la radio, ¿en qué otros proyectos profesionales se encuentra concentrada actualmente?
- En el exterior mantengo mis proyectos de consolidarme como consultora en estrategia de comunicación, media trainer y conferencista que vengo adelantando en varios países. Es un terreno netamente de hombres, donde un grupo de mujeres nos abrimos paso por toda América Latina. Soy socia fundadora de la ONG Mujeres de la Política que agrupa a mujeres de muchos países y trabaja por el tema de la igualdad de género. Acá soy actualmente la vicepresidenta de la Asociación Venezolana de Consultores Políticos y no descarto, en un futuro, abrir una academia que brinde contenidos actualizados y modernos a los estudiantes y jóvenes colegas periodistas. @yolimer
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