George Harris: “Quiero ser conocido y recordado por mi trabajo”
El comediante venezolano estrenó recientemente el espectáculo "El pueblo de uno" en el Carnegie Hall de Nueva York
Quien conoce el trabajo de George Harris sabe que es ligero, franco y divertido. Pues, cuando las cámaras se apagan es igual. Cercano, ocurrente y amable, como una persona que te conoce de toda la vida.
Por estos días, el artista –un caraqueño que se niega a revelar su año de nacimiento y a hablar sobre su vida privada-celebra haber estrenado el espectáculo El pueblo de uno en el Carnegie Hall de Nueva York.
“Gracias a Dios, me he presentado en el Movistar Arena de Chile y en el Luna Park de Argentina, que son arenas para 7000 personas y el Carnegie Hall tiene una capacidad para 3000, pero es un lugar icónico porque ahí han actuado Frank Sinatra, Barbra Streisand y todas las luminarias de Estados Unidos; así que haya aceptado que lo hiciera un comediante venezolano, que no hace shows en inglés y que, además, haya sido sold out… Fue emocionante. Trabajamos en este proyecto durante dos años porque evalúan el personaje, quién es, su alcance, etc. Actué muchas veces en Nueva York, pero oír a toda esa gente gritando, la acústica del lugar… es lo bello y lo histórico del sitio y creo que eso no solamente tiene repercusión hacia mí como venezolano sino también hacia los comediantes hispanos porque ahora nos van a ver con ojos diferentes”, dijo a El Universal vía telefónica desde Miami.
-Presentó por primera vez El pueblo de uno.
-Sí, mi equipo y yo decidimos estrenarlo en el Carnegie Hall. En El pueblo de uno hablo de muchas experiencias que me pasaron en mi país. Creo que una de las cosas que a la gente más le cautiva de mi show es cuando hablo de esas vivencias de mi niñez en Venezuela, de cómo nos criaron y educaron, de lo que vivimos comparado con lo de ahora. Este material incluye videos, fotografías y karaoke. Fue un subidón de energía grande oír al público no parar de reír durante dos horas y media. Espectacular.
-¿Cuáles comediantes inspiran a George Harris en 2024?
-Emilio Lovera, Laureano Márquez y “El conde del Guácharo” siempre me han parecido unos íconos de mi país. En una época consumí mucho de las cosas que Andrés López hacía en Colombia; me encanta el trabajo de Les Luthiers en Argentina; Adal Ramones, en México; y el humor español. Unos me gustaban más antes y ahora no tanto. También consumo mucha comedia en inglés.
-¿Qué es lo más difícil o retador para un humorista en la actualidad?
-El escenario. Tú puedes dar muchísima risa en las redes sociales (RRSS), como la televisión en los 80 y 90, que uno veía programas cómicos en los canales líderes del país y cuando veías a esos humoristas en el escenario eran otra cosa. Los que fascinaban eran Emilio, Laureano y “El conde” que se hicieron millonarios por su gran talento y crearon empresas. En las redes pasa igual, dependes de lo ingenioso que pueda ser tu productor porque en RRSS se te puede editar muy bien, que el producto quede lindo, que le pongan música, susto, sorpresa y que la gente diga: “¡Wow! Este chico sí es creativo”. Pero, realmente el talento se ve en el escenario, allí estás desnudo, no hay más nada. Puedes utilizar fotografías, videos, cantar y bailar, lo que tú quieras, pero el talento de comediante solamente se ve cuando se está frente a un público. He conversado y visto a algunos de ellos y me he dado cuenta que las redes les hacen un gran favor porque los post-producen mucho.

Por estos días, el artista –un caraqueño que se niega a revelar su año de nacimiento y a hablar sobre su vida privada-celebra haber estrenado el espectáculo El pueblo de uno en el Carnegie Hall de Nueva York.
“Gracias a Dios, me he presentado en el Movistar Arena de Chile y en el Luna Park de Argentina, que son arenas para 7000 personas y el Carnegie Hall tiene una capacidad para 3000, pero es un lugar icónico porque ahí han actuado Frank Sinatra, Barbra Streisand y todas las luminarias de Estados Unidos; así que haya aceptado que lo hiciera un comediante venezolano, que no hace shows en inglés y que, además, haya sido sold out… Fue emocionante. Trabajamos en este proyecto durante dos años porque evalúan el personaje, quién es, su alcance, etc. Actué muchas veces en Nueva York, pero oír a toda esa gente gritando, la acústica del lugar… es lo bello y lo histórico del sitio y creo que eso no solamente tiene repercusión hacia mí como venezolano sino también hacia los comediantes hispanos porque ahora nos van a ver con ojos diferentes”, dijo a El Universal vía telefónica desde Miami.
-Presentó por primera vez El pueblo de uno.
-Sí, mi equipo y yo decidimos estrenarlo en el Carnegie Hall. En El pueblo de uno hablo de muchas experiencias que me pasaron en mi país. Creo que una de las cosas que a la gente más le cautiva de mi show es cuando hablo de esas vivencias de mi niñez en Venezuela, de cómo nos criaron y educaron, de lo que vivimos comparado con lo de ahora. Este material incluye videos, fotografías y karaoke. Fue un subidón de energía grande oír al público no parar de reír durante dos horas y media. Espectacular.
-¿Cuáles comediantes inspiran a George Harris en 2024?
-Emilio Lovera, Laureano Márquez y “El conde del Guácharo” siempre me han parecido unos íconos de mi país. En una época consumí mucho de las cosas que Andrés López hacía en Colombia; me encanta el trabajo de Les Luthiers en Argentina; Adal Ramones, en México; y el humor español. Unos me gustaban más antes y ahora no tanto. También consumo mucha comedia en inglés.
-¿Qué es lo más difícil o retador para un humorista en la actualidad?
-El escenario. Tú puedes dar muchísima risa en las redes sociales (RRSS), como la televisión en los 80 y 90, que uno veía programas cómicos en los canales líderes del país y cuando veías a esos humoristas en el escenario eran otra cosa. Los que fascinaban eran Emilio, Laureano y “El conde” que se hicieron millonarios por su gran talento y crearon empresas. En las redes pasa igual, dependes de lo ingenioso que pueda ser tu productor porque en RRSS se te puede editar muy bien, que el producto quede lindo, que le pongan música, susto, sorpresa y que la gente diga: “¡Wow! Este chico sí es creativo”. Pero, realmente el talento se ve en el escenario, allí estás desnudo, no hay más nada. Puedes utilizar fotografías, videos, cantar y bailar, lo que tú quieras, pero el talento de comediante solamente se ve cuando se está frente a un público. He conversado y visto a algunos de ellos y me he dado cuenta que las redes les hacen un gran favor porque los post-producen mucho.

George Harris: "El talento de comediante solamente se ve cuando se está frente a un público" (CORTESÍA)
-¿Qué mantiene presente de los momentos en lo que intentaba hacerse un nombre en la profesión?
-La humildad y recordar de dónde vengo. Yo vengo de hacerlo todo yo solo, de trabajar mucho, de no ganar dinero, de muchas puertas cerradas, de pasarla mal, de dudar si servía para esto o no. Lo único que lo lleva a uno a algún lugar es la constancia y el talento.
-Hay gente que ha aumentado su fama o popularidad en TikTok valiéndose de sus audios y rutinas, ¿qué opina sobre eso?
-Me gusta, me parece chévere. Es divertidísimo ver a Dora Mazzone. Me da risa ver cómo escenifica lo que digo. Cuando hizo Usted no va, lo sacó todo el mundo y, luego, cuando la gente reconocía mi voz, me decía: “Eres tú”.
-¿No tiene problema con que su material sea usado o reproducido?
-Yo lanzo mi contenido a mi canal de YouTube y la gente saca de ahí lo que le gusta y lo sube a las redes, pero creo que eso, más bien, te suma, no te resta. Pero, por ejemplo, las rutinas con las que viajo no se pueden grabar, como pasó con la de El hijo único. De hecho, cuando la gente va a los shows dice: “Esto no lo había oído” porque, claro, los shows de los jueves no tienen nada que ver con mis rutinas. El material que giro no está expuesto en redes.
-En un momento en el que algunas personas desean likes y comentarios, ¿por qué resguarda su vida personal?
-La vida personal es algo que tiene que ser tuyo porque luego uno cambia de pareja y la gente pregunta: “¿Por qué se dejaron? Entonces, tienes que hacer doble duelo y dar explicaciones. Nunca he caído ni me gusta la farándula, no es el mundo que me interesa. Quiero ser conocido y recordado por mi trabajo, no porque me acuesto con esta. A mí me llegan unos cuentos increíbles de con quién he estado y pienso: “¡Qué creatividad!” Respeto a la gente que empieza con uno y termina con otro. Me parece fantástico. Cada quien tiene sus métodos para hacerse famoso, pero no quiero nunca caer en eso. Quiero que la gente me conozca por ser comediante. No me interesa que las cámaras entren a mi casa porque creo que el artista tiene que guardarse para sí. La gente no me tiene que ver a mi mamá ni verme cocinando. No muestro a mi pareja porque la respeto y no creo que quiera ser figura pública.
-¿Anhela convertirse en padre?
-Sí, me encantaría. La paternidad llegará cuando tenga que llegar, cuando tenga que pasar y ojalá pase porque la voy a disfrutar un montón. Estoy en un momento de mi vida en el que medito, quiero y valoro muchas cosas más que antes. Estoy en una edad chévere para emprender esa empresa (risas).
-¿Qué es necesario para que George Harris regrese a Venezuela?
-A mí me encantaría ir a mi país. No sabes la locura que siento de volver. No voy porque he sido muy frontal con el tema político, directo y he hablado cosas difíciles. No quisiera exponer a mi familia a una situación incómoda, que la pasara mal, por eso tengo ocho años que no voy, pero tengo unas ganas enormes de hacerlo. Quisiera poder hacer una gira, de, al menos, ocho ciudades, ir para allá dos meses, trabajar y ver a la gente. Ojalá que se pueda lograr pronto.
-Hoy por hoy, ¿qué le falta por hacer?
-He cumplido muchos sueños, algunos que me he trazado y otros que me han llegado por retruque. Me he presentado en lugares que nunca imaginé, sitios espectaculares en Chile y Bogotá, etc. Me gustaría hacer una serie para plataformas de humor. Y que la vida me lleve a donde me tenga que llevar. Voy a seguir dándolo todo. Todos los días trabajo como si estuviera al frente del Madison Square Garden, con todo mi corazón y me lo disfruto más que el público. A veces, uno se pone metas muy cortas, pero estoy abierto a que la vida me sorprenda con lo mejor que pueda tener para mí.
@yolilu
-¿Qué mantiene presente de los momentos en lo que intentaba hacerse un nombre en la profesión?
-La humildad y recordar de dónde vengo. Yo vengo de hacerlo todo yo solo, de trabajar mucho, de no ganar dinero, de muchas puertas cerradas, de pasarla mal, de dudar si servía para esto o no. Lo único que lo lleva a uno a algún lugar es la constancia y el talento.
-Hay gente que ha aumentado su fama o popularidad en TikTok valiéndose de sus audios y rutinas, ¿qué opina sobre eso?
-Me gusta, me parece chévere. Es divertidísimo ver a Dora Mazzone. Me da risa ver cómo escenifica lo que digo. Cuando hizo Usted no va, lo sacó todo el mundo y, luego, cuando la gente reconocía mi voz, me decía: “Eres tú”.
-¿No tiene problema con que su material sea usado o reproducido?
-Yo lanzo mi contenido a mi canal de YouTube y la gente saca de ahí lo que le gusta y lo sube a las redes, pero creo que eso, más bien, te suma, no te resta. Pero, por ejemplo, las rutinas con las que viajo no se pueden grabar, como pasó con la de El hijo único. De hecho, cuando la gente va a los shows dice: “Esto no lo había oído” porque, claro, los shows de los jueves no tienen nada que ver con mis rutinas. El material que giro no está expuesto en redes.
-En un momento en el que algunas personas desean likes y comentarios, ¿por qué resguarda su vida personal?
-La vida personal es algo que tiene que ser tuyo porque luego uno cambia de pareja y la gente pregunta: “¿Por qué se dejaron? Entonces, tienes que hacer doble duelo y dar explicaciones. Nunca he caído ni me gusta la farándula, no es el mundo que me interesa. Quiero ser conocido y recordado por mi trabajo, no porque me acuesto con esta. A mí me llegan unos cuentos increíbles de con quién he estado y pienso: “¡Qué creatividad!” Respeto a la gente que empieza con uno y termina con otro. Me parece fantástico. Cada quien tiene sus métodos para hacerse famoso, pero no quiero nunca caer en eso. Quiero que la gente me conozca por ser comediante. No me interesa que las cámaras entren a mi casa porque creo que el artista tiene que guardarse para sí. La gente no me tiene que ver a mi mamá ni verme cocinando. No muestro a mi pareja porque la respeto y no creo que quiera ser figura pública.
-¿Anhela convertirse en padre?
-Sí, me encantaría. La paternidad llegará cuando tenga que llegar, cuando tenga que pasar y ojalá pase porque la voy a disfrutar un montón. Estoy en un momento de mi vida en el que medito, quiero y valoro muchas cosas más que antes. Estoy en una edad chévere para emprender esa empresa (risas).
-¿Qué es necesario para que George Harris regrese a Venezuela?
-A mí me encantaría ir a mi país. No sabes la locura que siento de volver. No voy porque he sido muy frontal con el tema político, directo y he hablado cosas difíciles. No quisiera exponer a mi familia a una situación incómoda, que la pasara mal, por eso tengo ocho años que no voy, pero tengo unas ganas enormes de hacerlo. Quisiera poder hacer una gira, de, al menos, ocho ciudades, ir para allá dos meses, trabajar y ver a la gente. Ojalá que se pueda lograr pronto.
-Hoy por hoy, ¿qué le falta por hacer?
-He cumplido muchos sueños, algunos que me he trazado y otros que me han llegado por retruque. Me he presentado en lugares que nunca imaginé, sitios espectaculares en Chile y Bogotá, etc. Me gustaría hacer una serie para plataformas de humor. Y que la vida me lleve a donde me tenga que llevar. Voy a seguir dándolo todo. Todos los días trabajo como si estuviera al frente del Madison Square Garden, con todo mi corazón y me lo disfruto más que el público. A veces, uno se pone metas muy cortas, pero estoy abierto a que la vida me sorprenda con lo mejor que pueda tener para mí.
@yolilu
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