La vida suele dar muchos cambios, cambios que van dejando aprendizajes y enseñanzas que deben despertar en el ser humano, el verdadero sentir de la vida y las oportunidades que esta otorga. El mundo acaba de atravesar y se sigue enfrentando a la pandemia del COVID-19, que ha puesto fin a la vida de miles de personas en todos los continentes, hoy podemos entender que lo material poco representa en nuestras vidas, que lo realmente importante e imprescindible de estar vivo, es la vida misma.

Si vivir, abrazando más a nuestros familiares y amigos, enfrentando los miedos y acabando con ellos, expresando sin perjuicios y sin dañar a nadie tus pensamientos y sentimientos, siendo valiente para defender tus ideales, luchando con entusiasmo hasta alcanzar tus sueños, soñar, reír y llorar sin sentir arrepentimiento alguno. Vivir anhelando nuevos y mejores caminos, vivir siempre agradecido con lo que Dios y el mundo te ofrecen, vivir por fin comprendiendo que el mundo no nos pertenece, que es de todos los seres vivos que en el habitan.

Vivir respetando la diversidad de opiniones, pero nunca abandonado tu propio punto de vista, vivir sin perder el horizonte que te guía hacia la única verdad Dios, vivir consientes y asumiendo que lo que esta en el mundo, se queda en el mundo. Dios, la vida y el universo, entregan incansablemente nuevas oportunidades de vida, deja atrás el orgullo, abandona por siempre la queja y la desdicha, vive buscando y persiguiendo nuevas oportunidades.

Hoy es sensato entender y comprender que la vida misma, representa la mayor de las oportunidades, una oportunidad que se te ofrece sin haberla pedido, pero es solo tu decisión, de cómo vivirla.

Oportunidad palabra sencilla y fácil de pronunciar, pero con significado que encierra múltiples enseñanzas de vida, conquista oportunidades, camina firme, pero sonríe siempre, abraza fuerte y respira profundo, agradece siempre como el primer día, festeja y alégrate por cada momento vivido, enfrenta tus dolores y miedos, como una oportunidad más de vida y sin duda alguna encontraras la fortaleza para seguir adelante.

La vida nos ofrece miles de oportunidades, el hecho de seguir vivo lo es; internaliza y experimenta como un aprendizaje de vida, las constantes dificultades que debemos enfrentar, nunca renuncies a una oportunidad, por el contrario, aférrate a ella de eso se trata la vida. No te canses de perseguir oportunidades, son como las velas de un barco, que te soplan en la cara para recordarte que Dios te ama y que por siempre te entregara, la mejor de las oportunidades.

La vida en si misma representa una oportunidad y el mayor de los privilegios, para que nunca jamás olvidemos que no somos dueños del mundo, pero son y serán por siempre nuestras decisiones y actuaciones, las que marcaran las huellas hacia una tierra llena de oportunidades.

Marisol Fucci Bornachera

marfucci@gmail.com