Universidad palabra única que encierra conocimiento, sabiduría, ciencia, investigación y extensión, pero sobre todo representa la base sólida para el desarrollo y avance continuo de las comunidades, ignorar como se apaga su LUZ, sin duda alguna nunca será la estrategia correcta, para una gran nación, que ahogada en problemas, hoy más que nunca necesita del apoyo, asistencia y entereza de estas instituciones firmes en la búsqueda inquebrantable del valioso saber.

Es un error irreparable que un gobierno y una nación, le den la espalda a estas instituciones que representan el sendero del saber, y que lejos de volverse un tropiezo para el continuo avance de las ciencias, busca incasablemente exponer, evidenciar y verificar la verdad que rodea al ser humano, es por esto que no existe ni podrá existir nunca justificación alguna que pueda explicar, el derrumbe y quiebre de la LUZ del conocimiento.

No es estratégico y para nada inteligente, dejar de respaldar la LUZ que guía al progreso y vence la ignorancia. Una nación que cae lograra ponerse de pie y seguir adelante, si no renuncia y no da un paso atrás en la educación, ya que esta representa una base sólida que otorga al pueblo, la principal de las armas, el conocimiento y la sabiduría, para enfrentar la peor de las crisis.

Nunca será suficiente el esfuerzo invertido en el desarrollo y mantenimiento de las instituciones educativas. La universidad merece el respaldo, reconocimiento y esfuerzo, del pueblo y sus gobernantes, son la ventana hacia el futuro, son el espejo del mundo, son sin duda alguna el barco que nos mantiene a flote.

Las universidades deben por siempre irradiar LUZ, marcar senderos de enseñanza y aprendizaje que permitan y conviertan al ser humano, en un ser pensante, crítico y próspero, su LUZ debe ser el camino que ilumine a cada ciudadano para entregar a través de la ética, el respecto, el conocimiento y la mística de trabajo, el mejor de los aportes al continuo avance de las naciones. Como dijo Herbet “El objeto de la educación es formar seres aptos para gobernarse a sí mismos, y no para ser gobernados por los demás”.

Irradiar LUZ, es la meta de las universidades, señalar el camino también lo es, dejarse vencer y cerrar sus puertas no es una opción, es un grave y lamentable error, sin la LUZ del conocimiento, nos arropa la oscuridad, nos vence la ignorancia y nos acostumbramos a esperar y obedecer.

Las universidades deben por siempre irradiar LUZ, porque su luz, será por siempre la realidad que debemos afrontar, el pasado que debemos entender y el futuro que debemos forjar.

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