Pruebas de laboratorio aumentan semanalmente
En los hospitales estos servicios están en cierre técnico por la falta de reactivos. Un Perfil 20 costaba Bs 450 mil el viernes pasado y cuatro días después subió a 550 mil
DELIA MENESES
Los precios de los exámenes de sangre aumentan semanalmente. Los pacientes van de un laboratorio a otro para cotejar montos. En un establecimiento ubicado en Quinta Crespo el viernes pasado un Perfil 20 costaba Bs 450 mil y cuatro días después subió a 550 mil. Por un perfil preoperatorio, Mariela Costa pagó Bs 750 mil y por una prueba de heces Bs 100 mil.
En las clínicas los precios de las pruebas se duplican. El costo de un rutinario Perfil 20 en un centro privado en San Bernardino se ubica en 1.500.000 bolívares. Y las pruebas especiales rondan los 4 y 5 millones.
Nadim Naime, bioanalista, explica que los montos de los reactivos han aumentado hasta en mil por ciento pues se importan a dólar paralelo, de allí el incremento constante de los estudios. “Antes los proveedores te daban un plazo de hasta mes y medio para cancelar, ahora te exigen pago inmediato. En diciembre, los reactivos para pruebas de coagulación me costaron Bs 750 mil, hoy superan los 2.500.000”.
La operatividad de los laboratorios de la red de salud pública está amenazada por la escasez de reactivos. La mayoría de estos servicios se encuentra en cierre técnico. Según una investigación que llevó adelante los diez primeros días de marzo la Organización Médicos por la Salud y la Comisión Permanente de Desarrollo Social Integral de la Asamblea Nacional, el área de Laboratorio fue la más deficiente en los hospitales. En todos hay dificultades para practicar desde estudios de rutina como un perfil 20 a otros más complejos como los asociados a enfermedades como VIH, hepatitis, entre otras pruebas especiales.
La presidenta del Colegio de Bioanalistas del Distrito Capital y Miranda, María Cabrera, señala que la crisis de insumos de laboratorio incide sobre la práctica de cirugías electivas y de emergencia. Señala que hay instituciones como el Universitario de Caracas que solo realizan exámenes de orina y heces y que funcionan solo al 10% de su capacidad.
La inflación se ha ensañado con los insumos básicos de los laboratorios. Hace un año, un kilo de algodón costaba Bs 80 mil ahora medio kilo cuesta Bs 600 mil. Se necesitan 40 millones para adquirir un bulto de tubos de ensayo y millón y medio de bolívares para comprar las tiras reactivas para detectar valores.
Hay establecimientos que cobran aparte el kit de extracción, pues la inyectadora con la que se toma la muestra vale Bs 30 mil y el cilindro donde se deposita la sangre tiene un costo de más de Bs 60 mil, precisa Cabrera. Las maripositas o scalp, en el caso de que el paciente sea un niño, también se le cobran al paciente (un paquete de cien maripositas ronda los 3 millones).
La falta de reactivos para pruebas especiales es una realidad en casi todos los laboratorios. La práctica de test hormonales, perfiles de la tiroides y exámenes de los niveles de insulina, los marcadores tumorales para pacientes con cáncer, así como las evaluaciones para descartar el dengue, el virus de inmunodeficiencia humana o embarazos se redujeron debido a la falta de material.
“Hace dos años y medio que no tenemos reactivos para la prueba de Hemoglobina Glicosilada, un estudio que piden los médicos para evaluar el control de la diabetes”, explica Naime y agrega que el estudio de antígeno prostático que en enero costaba Bs 100 mil subió a 580 mil. Una prueba de embarazo supera los 150 mil bolívares.
Las fallas de los laboratorios de la red pública se agravan por la falta de personal. Los bajos sueldos obligan a los bioanalistas a emigrar a otros países. Hay un déficit de más de 60% de estos profesionales.